Creo que la educación no es un derecho sino que es un deber de cada ser humano y una obligación de los Estados el poner las condiciones para que los ciudadanos cumplan con este deber.
La educación es tu deber porque consiste en llegar a ser lo que eres, es decir, en lograr el máximo de tus capacidades. Un deber porque si tú no te perfeccionas nadie podrá hacerlo por ti, y de tu perfección depende el futuro de la humanidad.
Claro que el ser humano nace sin este poder de decisión sobre uno mismo, por lo tanto ya tienes otra obligación: "educa a tus hijos", haz que los niños puedan educarse. Pero has de saber que no es una "obligación social" ni una obligación de los Estados: es tu obligación. Es tu tarea.
Se trata de una obligación moral. No social. No estatal. Lo único que puede hacer el Estado es ayudarte a que puedas, pero el trabajo es tuyo, es tu deber: edúcate.
El incumplimiento del deber de educarse es un atentado gravísimo contra la humanidad. No podemos permitir la exclusión del mundo educativo de miles de niños (y más niñas) que se les niega la posibilidad de educarse. Es una dejación de responsabilidad intolerable de padres y gobernantes.
Pero en el mundo global no sólo tenemos este problema, tenemos otro más: el problema de la falta de educación en Occidente, que ha convertido la dejación del deber de educarse en una pandemia que afecta -de distinto modo- a los países desarrollados y a los empobrecidos.
Esta lacra, tanto en este lado como en el otro, es consecuencia de la pérdida de identidad de Occidente, que ha relativizado todo, hasta su propia valía: el problema de Occidente no es otro que la negación de sí mismo y de su cultura milenaria, que es entre otras cosas la mejor, la más elaborada, la que ha dado los mejores logros en lo espiritual y en lo material, en lo tecnológico, en lo especulativo, en lo humano y en lo divino.
Asumir los valores de occidente para difundirlos por el mundo es el gran reto de la educación 2015, puesto que todo el sistema de valores de Occidente es precisamente lo que se enseña, lo que puede enseñarse. Sin ir más lejos es plenamente occidental la educación para todos, los derechos humanos, la igualdad de oportunidades, el uso de la razón para superar los conflictos, etc. Sólo fomentando lo nuestro avanzaremos hacia una sociedad más justa.
El compromiso de Universidad 2015: difundir la cultura de calidad en todos los niveles y difundir nuestros valores también entre los países empobrecidos, por eso abrimos campos de cooperación con el exterior, a través del acuerdo con la fundación Enpade, de la cual soy vocal, y con una nueva área: Solidarity Pipeline Area -SPA- de fomento de la responsabilidad empresarial, que en pocos días tendremos el gusto de presentar al gran público.